jueves, 31 de enero de 2013

URGENTE:DESALOJO Y DESPOJO EN CUEVA DEL INCA !!


Fotos de la Minka qu...

La comunidad indígena Cueva del Inca recibe órdenes de desalojo y despojo

Por Laura - Wednesday, Jan. 30, 2013 at 2:49 PM

limtilar@hotmail.com 0388-4224106 Malka - Tilcara - Jujuy

La comunidad Cueva del Inca de Tilcara Jujuy, fue notificada ayer cerca de las 6 de la tarde con intimacion de desalojo y despojo, mediante el ayudante del fiscal Fernando Alancay.


La Comunidad Aborigen Cueva del Inca, viene realizando una Minka Comunitaria en Tilcara, a ello se sumaron dirigentes e integrantes de pueblos originarios de toda la provincia e inclusive de Salta. Llegaron a participar de la Minka , desde La Quiaca, Abra Pampa, Angosto del Perchel, Huacalera, Maimara, Tumbaya, Humahuaca, Perico, S.S. de Jujuy. Y desde Los Toldos, provincia de Salta, arribaron comuneros que integran el Kolla Marka, todos fueron a participar en esta minka que consiste en un trabajo colectivo solidario, una práctica ancestral propia de los pueblos originarios del mundo andino. La comunidad indígena Cueva del Inca viene realizando varios trabajos, que son de necesidad en el uso del territorio, como es el caso de retomo las tareas de construcción, actividad que recibió también la adhesión de algunos representantes del Consejo de Participación indígena reconocidos en la ley 23.302, y representantes del programa de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas (RETECI ). 

Esta comunidad viene reclamando el derecho al uso de su territorio que es parte de un derecho inalienable e inviolable el de mantener, preservar, y desarrollar su identidad histórica y cultural, derechos que están ligados inseparablemente a los territorios y de sus antecesores, un factor dominante a la hora de revisar la historia y los poderes que se olvidaron de los pueblos preexistentes. 

Los integrantes de la comunidad Cueva del Inca de Tilcara, siguen enfrentan presiones de quienes dicen “ser dueños” de esas extensiones de tierras que afectan a vecinos de Villa Florida en Tilcara. La familia Mendoza, se atribuye ser propietaria de esos terrenos y ayer por la tarde cerca de las cinco, llegaron al lugar y empezaron a insultar a los presentes de manera verbal para luego retirarse del lugar. Luego cerca de las 6 llego al lugar el ayudante del fiscal el Dr.: Fernando Alancay a los efectos de informar a la comunidad que a horas 11 recibió una comunicación telefónica de parte del fiscal de la causa Dr. Jorge Zulueta, quien le informo que dispuso imputar a los miembros de la comunidad por delito de “usurpación” además agrego que los presentes deberán despojar el lugar dentro de las 48 horas ( o sea para mañana jueves en la tarde) bajo apercibimiento de uso de la fuerza pública. También informo que los mismos están sujetos a investigación y deberán presentarse en la comisaría local a los fines de dar sus datos correspondientes en forma personal. Como así también solicitaron a la Comunidad, hacer llegar cualquier documentación necesaria a la fiscalía de investigación a cargo del Dr. Jorge Zulueta. 

La Comunidad Aborigen Cueva del Inca cuenta con personería jurídica, como así también fue relevada en el marco de la ejecución de la ley N° 26.160 y su prorroga Ley N° 26554, con carpeta finalizada a la espera de resolución de presidencia del INAI (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas), todo esto en el marco de los derechos consagrados en la constitucional nacional Art. 75 Inc. 17, de la Constitución Nacional y el Convenio 169 de la OIT, ratificado por Argentina a través de la ley 24.071 y la Declaración Universal sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU. 

La comunidad luego de conocer esta resolución del fiscal Dr. Jorge Zulueta, lamenta el desconocimiento del derecho indígena por parte del la justicia principalmente de la ley 26.160 y su prorroga 26.554 que no solamente es federal y de orden publico y declara la emergencia territorial de las comunidades sino que también ordena suspender todo tipo de tramites administrativos y judiciales que tengan tendencia a despojar de sus territorios a las comunidades existentes en el país. 

Los comuneros temen que otra vez, en la Quebrada de Humahuaca, se llegue a situaciones violentas con daños físicos a los pueblos originarios, donde ya sabemos el uso del territorio sigue siendo tema de disputa. Sobre todo cuando se entrecruzan derechos preexistentes, con otros intereses económicos donde la colonización y los nuevos estados latinoamericanos invisibilizaron o manifestaron la inexistencia de los pueblos originarios, negándoles el uso de sus territorios. 

En este nuevo siglo de recolonización, se siguen discriminando a las comunidades originarias, continúan los desconocimientos de sus derechos nacionales e internacionales, esperemos que en Tilcara, donde está vigente también el Municipio Indígena; esta vez tanto la justicia, como los gobiernos y sus representantes tomen las medidas necesarias para solucionar estos conflictos, sin afectar con violencia a los pueblos indígenas. 

INFORME CON EL APORTE DE: 

- ECCIJ Equipo de Comunicacion Comunitaria e Indigena de Jujuy 
- CCAIA Coordinadora de Comunicacion Audiovisual Indigena de Jujuy 
- FM Pachakuty - Abra Pampa - Jujuy - primer frecuencia originaria en el arco de la la ley SCA 


Fotos de la Minka que realiza la Comunidad Cueva del Inca
Por Laura - Wednesday, Jan. 30, 2013 at 2:49 PM
limtilar@hotmail.com 0388-4224106 Malka - Tilcara - Jujuy

http://argentina.indymedia.org/

NO A LAS REJAS EN EL CENTENARIO !!




“Macri gobierna con una actitud profundamente autoritaria, en vez de construir una mesa de diálogo con todas las organizaciones barriales avanza con represión. No escucha, ni consulta a los comuneros, a los bloques de la oposición de la Legislatura”

María Elena Naddeo, Frente Progresista Popular




“Es parte de la política represiva de un proyecto de ciudad de exclusión”, denunció la organización Hijos.



Los vecinos aducen la “ilegalidad de forma que tiene que ver con el avasallamiento de las competencias exclusivas de la comuna y el hecho de que no se dio intervención al Ministerio de Cultura, siendo que el parque fue declarado de interés cultural por la Legislatura de la Ciudad el año pasado”, explicó Baldiviezo. También señalan que “el enrejamiento se decidió sin realizar una consulta amplia e informada a los habitantes de los barrios aledaños ni a los feriantes”.



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AMPLIO RECHAZO A LA REPRESION QUE DESATO LA METROPOLITANA SOBRE UN GRUPO DE VECINOS Y PERIODISTAS

Freno judicial a las rejas del Centenario


Los vecinos presentaron un recurso judicial en oposición del enrejamiento del parque, iniciado el fin de semana. El gobierno porteño argumentó que contaba con el consentimiento de la Junta Comunal 6, pero un documento lo desmiente.


La Justicia porteña ordenó ayer frenar las obras para enrejar el Parque Centenario, al hacer lugar a una medida cautelar solicitada por la asamblea de vecinos, aunque dispuso que continúe el actual vallado, hasta tanto se resuelva si es procedente o no el cierre del lugar. La medida judicial fue solicitada por los vecinos y puesteros conformados en asamblea que ayer por la mañana presentaron el recurso de amparo. “En este momento (por ayer por la noche) no están cumpliendo porque continúan con las obras”, contó el abogado integrante de la Comisión de legales de la asamblea, Jonatan Baldiviezo. Legisladores, organizaciones sociales y de derechos humanos repudiaron ayer la represión de la Policía Metropolitana sobre los vecinos que manifestaban pacíficamente frente al parque. El Ejecutivo porteño insistió en que las rejas son un pedido de los vecinos y que su colocación había sido resuelta por la Junta de la Comuna 6, pero en la resolución de ese cuerpo, a la que accedió Página/12, no se hace mención al cierre del perímetro del parque.

Los asambleístas –más de 500 personas– optaron por interponer el recurso judicial antes de que el martes a la medianoche se desatara una nueva represión sobre ellos. Debatieron durante horas desde las 18 y se dividieron en comisiones, como parte del plan de resistencia al enrejamiento del centenario parque público. La represión se desató después de que alguien arrojara basura sobre la vereda “sin agredir a la policía”. La policía disparó balas de goma, y varios de esos proyectiles hirieron a la periodista de la Televisión Pública Julieta Egul.

Luego, los manifestantes que quedaban hicieron una sentada ante el cordón de Infantería de la Policía Metropolitana, unas personas se empezaron a pelear y pronto los efectivos “hicieron una encerrona que se les fue de las manos y terminaron en realidad encerrando a los periodistas, empujando a todos hacia una confitería que está en la esquina del parque”. Tres personas que fueron detenidas por personal de civil fueron liberadas ayer por la mañana.

“Macri gobierna con una actitud profundamente autoritaria, en vez de construir una mesa de diálogo con todas las organizaciones barriales avanza con represión. No escucha, ni consulta a los comuneros, a los bloques de la oposición de la Legislatura”, sostuvo la diputada porteña del Frente Progresista Popular, María Elena Naddeo. “Es parte de la política represiva de un proyecto de ciudad de exclusión”, denunció la organización Hijos. Por su parte, el legislador del Partido Socialista Auténtico Adrián Camps denunció la presencia de un grupo “parapolicial”: “Las imágenes transmitidas por un medio televisivo revelan que había agentes de civil, sin identificación de pertenencia a fuerza de seguridad alguna, ejercieron violencia física y colocaron precintos plásticos sobre personas que se manifestaban”.

El recurso contra las rejas fue presentado ayer por la mañana junto con un petitorio firmado por más de cincuenta personas y la jueza Andrea Danas decidió hacer lugar a una medida precautelar para frenar las obras, hasta tanto se expida respecto del tema el juzgado de primera instancia en lo Contencioso Administrativo y Tributario Nº 1. Lo que sucederá luego del viernes, cuando finalice la feria judicial.

La jueza ordenó que se “mantenga la situación actual del Parque Centenario”, por lo que “deberá abstenerse de continuar las obras de enrejado”. Aclaró que “ello no implicará en modo alguno la apertura, sino la estricta continuidad de la situación actual”.

Los vecinos aducen la “ilegalidad de forma que tiene que ver con el avasallamiento de las competencias exclusivas de la comuna y el hecho de que no se dio intervención al Ministerio de Cultura, siendo que el parque fue declarado de interés cultural por la Legislatura de la Ciudad el año pasado”, explicó Baldiviezo. También señalan que “el enrejamiento se decidió sin realizar una consulta amplia e informada a los habitantes de los barrios aledaños ni a los feriantes”.


La resolución Nº 11/12 de la Junta Comunal 6, a la que tanto el gobierno porteño y los comuneros se refirieron en distintos sentidos, no se pronuncia por la colocación de rejas. El Ejecutivo sostuvo que la Junta avaló el plan de obras para el parque. Sin embargo, además de eso la Junta Comunal resolvió en el artículo 2 “conformar una Comisión de Seguimiento de las iniciativas impulsadas por el Ministerio de Ambiente y Espacio Público”, que integrarían los miembros de la Junta, el ministerio, vecinos y representantes de organizaciones públicas o privadas de la comuna. Los comuneros Martín Iommi, de Proyecto Sur, y Ariel Angrisano, del Frente para la Victoria, precisaron a Página/12 que el pedido fue aceptado personalmente por Diego Santilli, a cargo de la cartera ambiental.


Informe: Carla Perelló.

http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-212960-2013-01-31.html










martes, 29 de enero de 2013

REPRESIÓN EN PARQUE CENTENARIO: COMUNICADO DE LA RNMA



MARTES 29 de enero de 2013 » Medios

Comunicado de la RNMA ante la represión en Parque Centenario




La Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA) repudia el accionar represivo de la policía metropolitana ocurrido durante la tarde - noche de ayer lunes 28 de enero, con el triste saldo de más de 22 personas detenidas. Dicho cuerpo policial -al servicio del Ministerio de Espacio Público de la CABA- reprimió con balas de goma, gases lacrimógenos y golpes a los/as vecinos que rechazaban la colocación de rejas en el perímetro del Parque Centenario, cuando se manifestaban en el cruce de Leopoldo Marechal y Díaz Vélez, en el Barrio de Caballito de la ciudad de Buenos Aires. Denunciamos en particular la represión sufrida por dos compañera/os nuestra/os. Por RNMA

Por RedAcción - LP

Difundimos:

COMUNICADO: AGRESIONES POLICIALES A MIEMBROS DE LA RNMA DURANTE REPRESIÓN EN PARQUE CENTENARIO


Ciudad de Buenos Aires, 29 de enero de 2013

La Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA) repudia el accionar represivo de la policía metropolitana ocurrido durante la tarde - noche de ayer lunes 28 de enero, con el triste saldo de más de 22 personas detenidas.

Dicho cuerpo policial -al servicio del Ministerio de Espacio Público de la CABA- reprimió con balas de goma, gases lacrimógenos y golpes a los/as vecinos que rechazaban la colocación de rejas en el perímetro del Parque Centenario, cuando se manifestaban en el cruce de Leopoldo Marechal y Díaz Vélez, en el Barrio de Caballito de la ciudad de Buenos Aires.

Denunciamos en particular la represión sufrida por dos compañera/os nuestra/os. Por un lado, Ezequiel Medone (integrante de los colectivos Antena Negra Tv y DTL!) quien realizaba la cobertura periodística de los hechos, y que recibió un golpe en la cabeza luego de acercarse a un policía a preguntar por los/as jóvenes detenidos. Por tal motivo tuvo que ser trasladado al hospital Durand donde recibió cuatro puntos de sutura. Por el otro, nuestra compañera Gigi (integrante de COB-La Brecha, colaboradora de la RNMA) fue rozada por una bala de goma en una costilla.

Desde la RNMA exigimos el cese de la represión y la persecución a los movimientos sociales y a quienes diariamente desde los medios comunitarios, alternativos y populares desarrollamos la tarea de comunicar una vez más el atropello que sufren las y los militantes sociales.

Se adjuntan imágenes de las lesiones sufridas por nuestros compañero/as.



Somos comunicación, somos herramienta de lucha.




Contactos:
Ezequiel Medone: 011 15 55789069
Gigi: 011 15 58019442
Patricio Lerner: 011 15 58019442
Red Nacional de Medios Alternativos


RESISTENCIAS: LA PENA ES DE NOSOTRAS



















las12

AILEN Y MARINA JARA




















VIERNES, 25 DE ENERO DE 2013

RESISTENCIAS.

La pena es de nosotras



Las hermanas Ailén y Marina Jara están presas desde hace casi dos años porque la Justicia no consideró válido que se defendieran de un vecino con antecedentes penales que quiso violar a una de ellas y que las acosaba desde hace años. El caso resume todas las vulneraciones posibles sobre mujeres pobres de la provincia de Buenos Aires.


Por Roxana Sandá

En el barrio Sanguinetti, de Paso del Rey, se viene amaneciendo a los ponchazos, entre las radios abiertas, los encuentros de difusión y las peregrinaciones a los tribunales para reclamar la liberación de las hermanas Ailén y Marina Jara, presas hace casi dos años por defenderse del intento de violación de un individuo con antecedentes penales que la Justicia provincial no parece interpretar. De a poco, el vecindario se va sacudiendo el miedo a hablar. “Aunque sea que les den la prisión domiciliaria hasta que comience el juicio oral”, el 18 y 19 de marzo. Dicen ahora que las adolescentes estaban viviendo un infierno, que su atacante, Juan Antonio Leguizamón, un “transa” de la zona, perseguía a Ailén desde que ella cumplió 16 años. Para entonces, él tenía 30. Vivían cuadra de por medio, se veían a diario. El les invadía la vereda, las esperaba; las chicas lo rechazaban para evitar males mayores. Para ellas el porvenir era cosa seria, primero porque soñaban con despegar de ese entorno de violencia en que se fue convirtiendo el barrio; bastante después para sostenerse ambas con las posibilidades que dan los trabajos, con el horizonte de los estudios. En la comisaría 5ª de Moreno acostumbran borrar de un plumazo algunos buenos fines. Poco importó que las chicas se presentaran espontáneamente a denunciar el ataque y a reconocer la legítima defensa. Elena Salinas, la madre de Ailén y Marina, escuchó cuando un oficial de rango le dijo al escribiente “poneles tentativa de homicidio y que se caguen las pendejas”. Sanguinetti es zona de comadres y manzaneras, de organizaciones territoriales y merenderos, “de gente humilde”, remarca Luz, familiar de las chicas y voz de las radios abiertas que piden la excarcelación de la Unidad Penal 8 de Los Hornos, donde están alojadas. “Será por eso que siguen presas. Si hubiéramos tenido una buena posición económica, esto no habría pasado de la comisaría. Pasó porque somos gente humilde. A estas chicas les arruinaron la vida para siempre y a la familia la están destrozando.”


El 18 de febrero de 2011, Ailén, entonces de 18 años, y Marina, de 19, fueron a bailar a un boliche que las entretuvo hasta la madrugada del 19. Emprendieron el regreso a casa cerca de las 7 de la mañana, cuando se les cruzó Leguizamón decidido a someter de una vez por todas a la menor de las Jara, que a esa altura la vivía celando y diciendo en el barrio que mantenían “una relación”. Ailén lo recuerda empuñando un arma de fuego que disparó al aire para amedrentarla. Marina apretó fuerte un cuchillo tramontina que sacó de la mochila y se lo clavó al agresor para liberar a su hermana. Se refugiaron en la casa familiar. El presentó una herida superficial en el tórax y un golpe en la cabeza que consignó la guardia médica del Hospital de Moreno. La pericia policial, que desde un principio le fue favorable, dio un parte de gravedad, contradiciendo el informe hospitalario. Leguizamón no llegó a estar tres días internado y hoy camina tranquilo por el barrio. Los vecinos dicen que después de lo de las chicas tuvo que irse por un tiempo, porque había terminado a los tiros con otro que se la tenía jurada por embarazar a su mujer. La oficial escribiente que puso en la carátula “lesiones graves”, luego que Marina entregara a la policía el cuchillo por considerar que actuó en legítima defensa, tuvo que retipear el documento con otra lógica. “¿Qué lesiones graves?”, la paró en seco un superior. “A ésta metele tentativa de homicidio.” Desde entonces, las vulneraciones son sistemáticas. Hoy, los fiscales de la causa no se oponen al arresto domiciliario, pero de ningún modo lo solicitaron. El tiempo les juega en contra: un quiste en uno de los ovarios y una infección ginecológica severa deterioran cada día más la salud de Ailén. Su hermana sufre problemas respiratorios y una fuerte depresión. Los informes psiquiátricos, psicológicos y multidisciplinarios del cuerpo médico del Servicio Penitenciario Bonaerense advierten que existe peligro cierto de vida por el estado anímico que las atraviesa, por no encontrarse en un contexto adecuado y porque podrían atentar contra sus vidas.

Leguizamón tenía restos de pólvora en su bermuda, lo que le adjudicaría la utilización del arma que niega haber disparado. Es una pericia técnica clave aportada tardíamente, pero que hace caer todo el armado de la causa montado sobre el móvil de que las hermanas habían disparado contra su victimario. Para los integrantes de la Comisión por la Liberación de Ailén y Marina, que acompañan y asisten a las jóvenes, el listado de funcionarios judiciales que actuaron “con errores o indiferencia” según el caso, es extenso y penoso. Lo encabeza la fiscal de instrucción Luisa Pontecorvo, que rubricó la instrucción policial, pidió la prisión preventiva y desconoció los testimonios de Ailén y Marina. La sigue la jueza de Garantías, Alicia Julián, que firmó el pedido de preventiva. Sopesaron riesgo de fuga y un filo de peligrosidad, cuando las hermanas colaboraron con la instrucción policial desde un primer momento. Los magistrados del Tribunal Oral Nº 2, Fernando Bustos Berrondo, Marco Barski y Graciela Larroque, dijeron que no estaban ahí para poner en cuestión las decisiones de la jueza de Garantías. “En realidad no han querido reconocer el tremendo error que cometieron al imponer la preventiva”, sostienen desde la Comisión. Capítulo aparte para las abogadas defensoras de oficio. María Celina Bereterbide hizo de chicle las acciones judiciales, omitió otras y dio la espalda a testigos valiosos. Su par, Manuela González, les aconsejó a las hermanas que en las declaraciones evitaran relatar la historia de los acosos previos que cometió Leguizamón contra ellas. También las acusó de ser “unas mentirosas”. Isidro Encina, el letrado que las representa en la actualidad, está tratando de sacarlas de “esta situación aberrante” con el cese de la prisión preventiva o una morigeratoria. “A partir de las pericias quedó claro que el único que portaba el arma y disparó fue Leguizamón. Cambió el escenario. En mi opinión, las garantías bien entendidas tienen que ver con derechos, pero hay un sistema represor que tiene que ver con estadísticas, y algunos sectores lo ven como algo bueno cuando en realidad se llenan los casilleros con inocentes. Aquí la cuestión de fondo con pruebas muy concretas demuestra que se trata de un victimario y dos víctimas. Mientras tanto, los jueces parecen decir ‘nosotros hacemos lo que queremos. Queremos que ellas queden presas, sean inocentes o culpables’. Les importa tres pepinos la calidad humana”.

Casi un mes y medio permanecieron detenidas en la comisaría 5ª de Moreno. Las condiciones no mejoraron cuando las derivaron a la 7ª de La Reja, donde funciona una comisaría de la mujer, “por conflictos y problemas de hacinamiento”, explica Manuel González, de la Comisión por la Libertad de Ailén y Marina. Pero el horror sobrevino durante la estadía en los penales. En el de máxima seguridad de Magdalena, donde sufrieron todo tipo de agresiones e intentos de violación. Y una vez trasladadas a la Unidad Penal 5 de Mercedes, donde permanecieron en “buzones”, celdas de tránsito de dos metros por cuatro, las 24 horas del día, con salidas escasas para limpiar o bañarse. A Ailén, que había estado internada en el Hospital San Martín de La Plata durante nueve días por su afección ginecológica, el 27 de diciembre la jefa de guardia del penal, Anahí Maciel, le negó los elementos de limpieza para que higienizara la letrina de la celda e impidió que las hermanas salieran a bañarse. Entre gritos y trato humillante, Maciel entró con personal de la Guardia Armada a la celda y arrinconó a Ailén entre la letrina y el lavatorio. La paliza y las patadas de los borceguíes le llenaron de hematomas el cuerpo. Esa noche aceleraron su traslado definitivo a la Unidad Penal 8 de Los Hornos, pero en La Plata denunció a Maciel ante la Procuración, con intervención del Comité contra la Tortura, de la Comisión Provincial por la Memoria. La penitenciaria fue exonerada. “Son 22 meses de una causa armada con claro contenido de clase y de género”, precisa González. “A Leguizamón siempre lo rechazaron. Por parte de él hubo un acoso permanente, violento; no las quería ver con otros chicos. Pero Ailén y Marina nunca se sometieron, siempre le hicieron frente, siempre fueron para adelante. Nunca se callaron, y esto también da cuenta de quiénes son estas chicas. Cuando Ailén sufrió la golpiza de Anahí Maciel, tuvo la misma actitud: en su condición de sometida a los designios del Servicio Penitenciario, siguió sosteniendo el derecho a tener una letrina limpia. La bronca, pese a que la dejaron sangrando y con moretones en el abdomen, los brazos y el cuello, la impulsó a vencer el sometimiento.”

La trabajadora social Gabriela López e integrante de la Comisión por la Libertad de las hermanas, describe que los barrios “están cruzados por la cuestión penal. Deberíamos dejar de mirarnos el ombligo con relación a la militancia y a los grupos de género cuando en realidad hay sectores que están por fuera de cualquier tipo de organización, y hacer visible un tema que les toca a esos sectores, principalmente”. Para González, las condiciones que desembocan en estas realidades se embarran en “la connivencia de la policía con delincuentes de poca monta en la venta de droga, en el disciplinamiento del barrio. Hay condiciones de vida que tienen que ver con la vulneración del acceso a la Justicia, al trabajo, a la salud, y se van generando lazos sociales de dominación, de avasallamiento de los derechos del otro por parte de estos pequeños delincuentes, porque tienen cobertura de la policía del barrio. En un contexto social adverso donde se respira violencia institucional, social y de género, estas relaciones violentas entre hombres y mujeres se viven hacia adentro, con sus propias familias. Ailén y Marina son estigmatizadas porque no se sometieron a los designios de un tipo que se cree poderoso”. Elena vivió otro tanto en carne propia. También fue víctima de la violencia intrafamiliar que ejercía sobre ella el padre de las chicas. Alguna vez confió que le costó mucho despegar de esa relación enfermiza. La ayudó a salir adelante su profesión de enfermera y el apoyo constante de sus hijas. “El producto de toda esta lucha de Elena por sobreponerse y empoderarse también explica quiénes son Ailén y Marina. Es conmovedor ver el apoyo anímico y vincular que tienen estas mujeres”, reconoce González. “Elena se generó una subjetividad sobre la que han podido sostenerse ella y su familia.”

“Me pegaron un muerto que está vivo”, suele bromear amargamente Ailén. Hace un par de meses, con Marina empezaron a describir en el papel los sentimientos que las cruzan en el encierro, para hacer catarsis de todo lo que se supone indecible y para tender puentes con las redes que se armaron en el afuera. “No soy de escribir texto u opiniones”, avisa Marina en una de las cartas. “Me gusta mucho leer en mi tiempo libre, aunque en este lugar tengo tiempo de sobra para pensar y escribir (...). Acá, a pesar del lugar donde me encuentro, siento que crecí de golpe. Yo caí a los 18 años. Bueno... no es mucha la diferencia, porque ahora tengo 19 años, estoy por cumplir los 20. Digo que crecí de golpe porque acá estoy viendo y viviendo mi realidad, cosa que en la calle no me daba cuenta de muchas cosas. Hablo de las más mínimas. Una de ellas es la más valiosa, que es la ‘libertad’. Porque yo estando en la calle estaba libre de cuerpo, pero no de pensamientos y de realidades. No me daba cuenta del valor y el esfuerzo de mi mamá, ella es lo único que tengo, la única que no me va a dejar sola (...). Ellos nos juzgan por lo que hizo cada una, pero nunca se ponen a ver cómo fueron realmente las cosas. Sólo juzgan y te condenan. Siempre le ven el lado malo, pero nunca toman conciencia y no consideran lo que es justo. No se ponen a pensar, a analizar por qué lo hizo. Sólo dicen: lo hiciste, sos culpable.”

En otra de las cartas, Ailén ruega por hacer algo que la corra de la impotencia. En eso está ahora, aguardando un juicio justo contra viento y marea. “Lo que no comprendo es a esta Justicia que defiende lo indefendible y por eso gente como nosotras, de pocos recursos económicos, termina pagando con la libertad, mientras otros sólo la pagan con billetes. Tampoco comprendo qué es lo que estoy pagando. Pienso que le están quitando tiempo a mi vida en vano. Mientras estoy acá hay mucha gente que necesita ayuda y no poder dársela se siente horrible. Paso mis días ocupados para no pensar y encontrarme en esta realidad que vivo todos los días, sobre todo para poder lograr y cumplir con mi meta que es ir a la universidad de medicina y ser pediatra, salvarles la vida a todos aquellos chicos que lo necesitan.”

Un relevamiento del Observatorio Legislativo bonaerense define como alarmantes los datos relacionados con jóvenes y trabajo, salud y educación. Del informe además se desprende que el partido de Moreno tiene el registro más alto de muertes por femicidio en toda la provincia. La violencia hacia las niñas, adolescentes y mujeres es ejercida por personas conocidas del barrio o forma parte del contexto familiar. Todo esto sumado al acceso precario a centros asistenciales y de salud que prevengan conflictos de alta vulnerabilidad social, violencia de género, adicciones y espacios para niñas, niños y jóvenes orientados a la prevención de cualquier tipo de situaciones y problemáticas complejas, marcan el verdadero estado de situación.



http://www.pagina12.com.ar


VIOLENCIAS: OTRA VUELTA DE TUERCA




las12       


LOBO ESTÁ


LA MISOGINIA DEL SISTEMA JUDICIAL Y SUS ESTRATEGIAS PARA DISCIPLINAR A QUIENES DENUNCIAN LA VIOLENCIA DE GÉNERO.



Por Luciana Peker

                                                                      

“A mí me lo dijeron expresamente. Yo fui a denunciar el abuso y el secretario del Juzgado me dijo: “¿Sabés que si no lo podés probar perdés a tus chicos?” dice PW, una de las cuatro mujeres que junto con su abogado accedieron a hablar con Las12.


VIERNES, 25 DE ENERO DE 2013

VIOLENCIAS

Otra vuelta de tuerca

Los avances en materia de violencia de género están generando reacciones contrarias que llegan, incluso, a quitarles la tenencia y prohibirles ver a sus hijos a algunas madres que denuncian abuso sexual o violencia familiar. Los casos se repiten en territorio porteño y bonaerense con una ideología patriarcal donde se fuerza la revinculación del padre con los hijos y se penaliza a la denunciante. La situación es tan grave que podría terminar desalentando la búsqueda de justicia. Las12 pudo hablar con cuatro madres a las que les quitaron a sus hijos/as en operativos policiales y que perdieron todo contacto con ellos.


 Por Luciana Peker




El peor escenario posible: cuando la violencia de género se denuncia en remeras, en noticieros, en la playa y se vuelve políticamente correcto manifestarse en contra, las madres que denuncian esa violencia reciben como un boomerang el castigo por denunciar esa violencia de género. No se trata de una excepción ni de un caso aislado, sino de la denuncia de una estrategia sistemática de demonización de las mujeres que denuncian al padre de sus hijos/as y que consideran que el riesgo de la violencia latente es tal que no debe vincularse con los niños/as. Las corrientes ideológicas conservadoras que pretenden instalar la figura del padre por sobre todas las cosas –incluso por sobre el cuerpo de los más chicos– terminaría, entonces, castigando a quienes denunciaron la violencia o el abuso sexual y no a quienes fueron denunciados.

Por eso, Las12 juntó a cuatro madres –identificadas por sus iniciales: A. V., L. A., S. L. y P. W.– que se sienten penalizadas por la justicia por haber denunciado violencia familiar o abuso sexual contra sus ex maridos. Ellas coinciden en resguardar su identidad para proteger a sus hijos o hijas pero se agrupan para que se entienda que no están hablando de su historia como de un caso individual sino de una historia que se está tejiendo en respuesta a los avances de los últimos años como de una pelota que después de mucho avanzar ahora está volviendo al arco contrario. Pero no se trata de un juego, sino de la vida de ellas y de sus hijos/as. Y de un plan al que llaman “sistemático”, donde se descalifica su denuncia e incluso el testimonio de los chicos por creer que está maniobrado por mujeres que sólo buscan alejar a los padres y sacarles plata.

A dos de las entrevistadas, aunque parezca inverosímil, después de denunciar violencia les terminaron quitando a sus hijos/as. El nombre técnico de ese puño cerrado del Poder Judicial es reversión de guarda. “Es una modalidad totalmente novedosa que ha tenido origen en Lomas de Zamora y se está repitiendo”, advierte Juan Pablo Gallego, abogado (en distintas instancias) en tres de las cuatro causas relatadas en esta nota, ex querellante contra el sacerdote Julio César Grassi en el expediente que lo condenó por abuso sexual y autor del libro Niñez maltratada y violencia de género, de Editorial Ad-Hoc.

Hasta ahora, el sentido común de la Justicia indicaba que una madre tenía que hacer algo muy grave para que se la alejara de su hijo/a. Ahora se rompió hasta ese sentido. La razón de la Justicia para dar este vuelco contra las madres que denuncian es que las madres intoxican a sus hijos (un argumento similar al síndrome de alienación parental que dice que si los chicos no quieren ver a su progenitor no es por su propia vivencia de violencia sino porque las madres les llenan la cabeza y entonces se logra descalificar la voz de los niños/as) y entonces un puñado de psicólogos/as apoyan los dictados de reversión de tenencia que justifican el síndrome de la madre maldita.

Pero las mujeres que fueron a pedir ayuda a la Justicia y se encontraron con un allanamiento que les vació sus casas se muestran desesperadas y desalentadas por una medida que nunca esperaron. “Estoy peor que antes”, dice la madre que no ve a sus hijos desde octubre. “Voy todos los días a Tribunales”, cuenta la mamá a la que le arrancaron sus hijos en medio de las fiestas. “Vivimos todos los días con miedo a que nos secuestren a nuestros hijos”, cuentan las madres que ya pasaron por todos los pasos de un sistema judicial que sigue las mismas huellas hasta generar más temor que protección y se sienten las nuevas víctimas de un Poder Judicial al que ponen en tela de juicio.

Los chicos y chicas fueron llevados (o secuestrados, como dicen ellas) en medio de operativos comando con policías y con los pibes y pibas suplicando, gritando, pidiendo, llamando y escondiéndose para no irse del lado de su mamá. Tal vez si el video del desgarro se viera por YouTube o lo repitieran los programas de la tarde... tal vez así escucharíamos ya no la voz sino los gritos. Pero, por ahora, los chicos y chicas no fueron escuchados. “El Estado argentino puede tener responsabilidad internacional por esta pandemia de casos que demuestran una reacción de la Justicia misógina”, alerta Gallego.

“¿Cómo lo cuento, desde el secuestro o todo?” se pregunta A. V., mamá de tres hijos de 3, 10 y 12 años, para contar que el ilícito que pudo paralizar a un país hoy sólo la paraliza a ella, que tiene los cuartos cerrados de sus hijos para no ver la ausencia y una planta que entra de la vecina porque no quiere ocuparse de su casa mientras ellos no estén. Ella denunció al padre de sus hijos por violencia. Desde el 2 de octubre que no ve a sus hijos.
¿Qué pasó para que la Justicia llegara a sacar a los chicos de tu casa?

A. V.: –Yo denuncie al papá, en un Tribunal de Familia de Lomas de Zamora, por violencia. Porque torturaba a sus hijos metiéndolos debajo de una ducha de agua fría y apagando la luz. Los niños fueron escuchados por el organismo zonal de protección de los derechos del niño y dijeron que no querían ver al papá porque les pegaba. Pero se llegó a un expediente de reversión de tenencia y yo no los veo a los chicos desde el 2 de octubre, cuando allanaron mi domicilio once personas mientras yo, que soy ginecóloga, estaba en el consultorio. Entraron un comisario y montones de personas. El bebé estaba jugando en el piso y al mayor, que estaba a los gritos, le prometieron que si se calmaba iba a poder hablar con su mamá. Después van al colegio de mi hijo de 10 años. A partir de ese momento están incomunicados: no tienen Internet ni pueden hablar conmigo. Y una cosa que me parece importante es que la orden dice que si estaba yo y sufría una descompensación, que me trasladaran al nosocomio más cercano sin hacerse responsables de mi estado de salud. O sea que me querían hacer pasar por loca.
¿Por qué se llega a prohibirle el acercamiento a una mamá que denuncia violencia? ¿Qué alegan?

Juan Pablo Gallego: –No se alega nada. Normalmente estas medidas están destinadas a proteger a un niño de una situación de abuso, de violencia, de negligencia, de violencia de género.

A. V.: –Los nenes no querían visitar al papá. Los jueces estaban ahí cuando lo dijeron. Fueron intimidados e interrogados por cuatro adultos y dijeron “no queremos verlo”, pero les dijeron “tu opinión es una hojita más del expediente”. Llegaron a decirle a mi hijo mayor “¿no pensaste que tu mamá podría tener un accidente?”.
MOTIN DE JUGUETES

L. A. comparte el mismo desgarro. Cuida a las mascotas de sus dos hijos, una nena de nueve y un nene de diez años, mientras ellos no están. No pudo comenzar año nuevo con sus hijos porque en el medio de las fiestas, y en el último día hábil del 2012 la sorprendieron con un operativo de guerra pero con el botín de dos niños. Nunca creyó que su denuncia por violencia y abuso sexual la podría separar de quienes intentaba resguardar: “El 27 de diciembre, estando en casa sin ningún tipo de antecedente o advertencia de que algo podría ocurrir, ni siquiera por instinto, tocan el timbre un oficial de Justicia, la secretaria del Juzgado Civil Nº 8 Nacional de Primera Instancia a cargo de la magistrada Julia Servetti de Mejías, quien lleva el juicio por violencia familiar y tenencia de los chicos desde el 2009. En el Juzgado existen varios antecedentes del cuerpo médico forense y de psicólogos particulares que aconsejan que no es buena la revinculación con el padre. Yo denuncié la violencia contra mí y contra mis hijos. Y unos meses después, el 27 de noviembre del 2009, hice una denuncia por abuso sexual en la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema. No se hicieron bien las pericias ni las indagatorias en la causa de abuso. Se continúa con la causa de violencia y de tenencia”, relata.
¿Cómo pasás de denunciante a denunciada? ¿O de denunciar a ser separada de tus hijos?

L. A.: –El 27 de diciembre, por una medida cautelar, invaden mi casa tres patrulleros, una psicóloga que se presenta como designada para facilitar el cambio de guarda y que, ahora sabemos, dice que los chicos están pasando por un proceso de desintoxicación de los sentimientos de la madre y que solo van a tener contacto con el padre y los padrinos, que es donde están viviendo, dado que los chicos vuelven a negarse a vivir con el padre. Este episodio terminó bastante violentamente porque los chicos entran en una crisis nerviosa. Mi casa estaba invadida de policías. Yo entré a la ambulancia con custodia policial al igual que los chicos. La pediatra de turno del Hospital Zubizarreta nos dice que los chicos entren con la madre. El padre los manotea y le pega una trompada a una de las letradas. La policía me saca del hospital. De esta manera, el Juzgado le entrega la tenencia al padre. Los chicos quedan internados un día pidiendo estar con la madre. En ningún momento se les permitió hacer llamadas telefónicas ni el uso de Internet. Estamos totalmente incomunicados. Mi mayor angustia es no saber qué pasa por la cabecita de ellos después de un operativo donde se los vuelve a revictimizar, en una casa ajena, sin sus tratamientos psicológicos, y la nena sin su tratamiento médico. No hay ninguna seguridad de cuál es el estado físico y psico-emocional de ellos. Me presento todos los días en los juzgados y no recibo nada más que “ahora lo tiene que evaluar fulanito” o “alguna fundamentación habrá”. Pero no me dan ni un régimen de visitas.

A. V.: –Mis nenes hace tres meses que están impedidos de contacto. Pero robaron un teléfono y el de 10 años me llamó. Me contó que el mayor está enfurecido, que dice que va a matar al padre o que se va a matar y que el de tres años llora todo el día. Fui a la comisaría a hacer la denuncia de lo que pasaba. Y mi hijo me volvió a llamar diciéndome “Mamá, por favor, ayudame, me quise escapar y la reja está electrificada”. Yo le paso el teléfono a Juan Pablo Gallego y hacemos una denuncia por privación ilegítima de la libertad. Pero nadie actuó.

J. P. G.: –En el caso de A. V. fui testigo de que el chico llamó, la verdad, desesperado. El tema de pretender “desintoxicarlos” demuestra que la ideología está por sobre la ley.
¿Cuál sería la ideología?

J. P. G.: –La ideología del patriarcado, del machismo y la que justifica la violencia, y la misoginia mantiene una posición dominante pese a los importantes avances legislativos y, más aún, como reacción a los avances legislativos.
Pareciera que tenemos mejores leyes para denunciar la violencia de género, pero en la práctica las actuaciones judiciales le dicen a la denunciante “tené cuidado porque te podemos sacar a tus hijos”...

P. W.: –A mí me lo dijeron expresamente. Yo fui a denunciar el abuso y el secretario del Juzgado me dijo: “¿Sabés que si no lo podés probar perdés a tus chicos?”. Yo dejé la denuncia pero me quedé pensando cuántas se animaron a dejar el papel y cuántas no.

J. P. G.: –Lo que marcan estos casos es una avanzada conservadora. Estas extracciones violentas de niños con personal policial uniformado, mediando violencia, contra la voluntad de los niños, están mostrando la cúspide de la ofensiva. La creación de esta modalidad fue en Lomas de Zamora, donde se dispone dictar el cambio de vida de los menores. ¿Qué significa? La aniquilación del vínculo materno-filial. Estamos ante una ofensiva que va más allá del clásico backlash del que se ha hablado como una reacción frente al avance contra el abuso sexual.
¿Es un paso más?

J. P. G.: –Sí, es un paso más evidentemente. La multiplicación de estos hechos, y que haya ocurrido un caso de estas características en la Capital Federal en el último día hábil de diciembre, es un paso más en llevar la misoginia al grado de una pandemia hasta ahora no conocida.
¿No son excepciones ni casos aislados sino una tendencia a castigar a las madres que han denunciado violencia de género o abuso sexual y a revincular a los chicos con sus padres?

J. P. G.: –Sí, me llama la atención que esto ahora se propague a Capital Federal. Hay varios casos no resueltos en la Suprema Corte de la Provincia de Buenos Aires. Por eso digo pandemia. Es un juego ideológico donde parece que la castigada es la madre y el castigado es el niño.
¿Hay alguna posibilidad de llegar a la Corte Suprema o a un tribunal internacional?

J. P. G.: –La actuación de estos jueces está engendrando una responsabilidad internacional del Estado en el marco de procedimientos que dañan para siempre a niños con uniformados irrumpiendo en los hogares contra su voluntad. La violencia institucional redimensiona la violencia de una manera perversa.

L. A.: –El 27 de diciembre todo el operativo habrá durado en casa cuatro horas. Los chicos se comunicaron directamente con Juan Pablo a su celular y llamaron a compañeritos de colegio para decirles que la policía se los quería llevar y que por favor vengan a ayudarlos. Armaron barricadas con los muebles. Se encerraron en el baño con sus mascotas. Les dijeron a las personas del Juzgado y al padre, que estaba presente, que no querían irse y la oficial del Juzgado les dijo que ellos eran muy chiquitos para tomar decisiones. No les dieron posibilidad de manifestarse de ninguna otra forma.

J. P. G.: –En el caso de L. A. yo actué como representante del niño (I.). Tuve mi conversación a solas. El me expresó situaciones de violencia por las cuales él no quiere tener este vínculo con el papá y en ese marco yo le di mi teléfono celular. El día del operativo me llamó. Era desgarrador. Yo no soy tonto y hace muchos años que trabajo en esto. No había ninguna madre diciéndole nada. Estaba desesperado.
¿Qué se busca al separar a los chicos de su madre?

P. W.: –Está la intencionalidad de romper el vínculo materno-filial. Pero además el chiquito para denunciar el abuso requiere de un gran coraje para animarse a romper con este secreto. En todos estos casos los chicos han sido muy valientes y han roto este secreto, han pedido ayuda y han encontrado madres que los han escuchado, que tampoco es frecuente, y han salido a defenderlos. Nosotras vemos que hay una gran campaña para denunciar la violencia y parecería que tenemos más recursos y protección. Pero conocemos muchos casos, por lo menos ochenta, en donde las madres hemos sido castigadas por haber cometido el “pecado capital” de haber ido a la Justicia a buscar justicia. Acá hay dos leyes. Por un lado está la Convención de los Derechos del Niño, pero en la práctica se castiga a quien rompe el silencio y se busca doblegar a la madre y al niño, y si eso no es suficiente, se ordena la reversión de la tenencia. ¿Cómo le explicás a un chico que sea valiente y hable si es penalizado por eso? Todas nosotras fuimos a la Justicia en busca de protección y no sabíamos que recién ahí comenzaba el abuso.

UN PLAN SISTEMATICO DE REVINCULACIONES


“¿Por qué lo defendés si a vos te trata peor?”, le dijo un día su hija mayor cuando tenía cinco años. P. W. decidió no aguantar más los golpes y separarse. “No importa cuán destruida estoy, yo no tengo derecho a ser madre de estas chicas si les enseño que esto está bien”, se dice hoy como tuvo que repetirse tantas veces desde 2007 y ahora mismo, cuando sus hijas tienen 7, 9 y 12 años. Hasta el 2009 él tenía un régimen de visitas. Ella repetía un latiguillo al que llama “el manualcito”: “Papá no es malo, pero está aprendiendo a tratarte bien”. El manualcito no alcanzó cuando una de sus hijas vino con una fractura en la mano y otra con un desplazamiento del cráneo. Pero el 7 de junio del 2009 el mundo y sus manuales se despedazaron. Su hija más chica se levantó de una pesadilla diciendo “papá es malo”. Ella le preguntó por qué y recibió como respuesta “juego a bajarle el pantalón y tocarle el pitulín para que esté contento”. El manual terminó en denuncia. “Ellas estaban amenazadas, si me lo contaban él me iba a matar. Yo hago la denuncia cuando la jefa del Hospital Fernández me dijo que mis hijas estaban siendo abusadas física, emocional y sexualmente por el progenitor. En Cámara Gesell las chicas relatan situaciones de abuso. Ahí pido la suspensión de las visitas que yo misma había pedido. Hay una testigo presencial que es una mucama. Los peritos de parte y oficiales dijeron que mis hijas habían sido abusadas y tenían un estrés postraumático gravísimo por la perversión de los abusos que habían padecido. Mi hija del medio terminó con un brote psicótico escuchando voces y mi hija mayor tuvo un intento de suicidio. Pero la jueza civil estaba buscando sistemáticamente la revinculación con el padre. Yo tengo la tenencia pero me prohibieron brindarles atención médica o psicológica. Yo vivo en Capital, mis hijas van al colegio en Zona Norte y las derivaron a un centro en Avellaneda con profesionales que les dicen ‘el problema es tu mamá, que te dejó sin tu papá’, y tienen prohibido el ejercicio de la profesión por carecer de matriculación. Pero no casualmente son las mismas a las que derivaron a A. V. y no son sesiones psicológicas sino de tortura.”

J. P. G.: –Ella está domiciliada en Capital Federal y le ordenan hacer esta vinculación en Avellaneda con los mismos profesionales del caso A. V. A mí me sorprende.

A. V.: –Estas profesionales hablan del Síndrome de Alienación Parental (SAP) y del objetivo de la reprogramación.

P. W.: –En los informes de mis niñas entrevistan al padre y dicen que las chicas están sujetas al SAP. Hay pruebas. ¿Sabés lo que es una testigo presencial en un caso de abuso? La fiscal me acusa de usar el SAP en el marco de un divorcio conflictivo. Hoy la situación de mis chicas es que las obligan a revincularse con la familia paterna, que fueron cómplices del abuso, y ellas se niegan rotundamente a verlos; sin embargo, están obligadas a hacerlo. La propia asistente social viola el impedimento de contacto porque les trae cartas y regalos del padre. Y tengo un expediente de reversión de guarda.
¿La reversión de guarda es una amenaza?

P. W.: –A mí me dijeron expresamente que si no dejo las cosas como están me van a sacar a mis chicas.

J. P. G.: –Ella tiene una cantidad de informes que dicen que sus niñas fueron abusadas por su padre, por lo cual tiene el deber legal de denunciar el abuso sexual. No puede mirar hacia el costado. También es disparatado obstruir la elaboración del trauma en niños. Se lleva no sólo a la impunidad, sino a un daño de las víctimas que es irreparable. La asimetría se repara con justicia. En el caso de Grassi, los chicos me decían “¿Quién me va a creer si este hombre está todo el día en televisión, es poderoso y habla con los presidentes?”. La condena fue muy reparadora para las víctimas. Acá se profundiza la asimetría entre víctima y victimario y es gravísimo.

P. W.: –No es fácil salir de estas situaciones. A mayor nivel socioeconómico y cultural, más difícil es salir porque se supone que de esto no se habla. Mis hijas fueron echadas del colegio cuando denunciamos el abuso. Está mal visto no aguantar la violencia. ¿Cómo vas a denunciar a hombres que no son kiosqueros sino directores de banco, médicos, directores de instituciones públicas? Son intocables. La asimetría de poder es absoluta. El nivel de desprotección es absoluto. En todos los casos somos las madres malditas. Los castigados son los niños, pero les destruís lo último que les queda, que es el vínculo con la madre.

A. V.: –Encontramos en todos los casos un mismo modus operandi.

S. L.: –Así como hubo un plan sistemático de apropiación de niños y de robo de identidad en los setenta, acá también se está dando un plan sistemático donde los chicos están siendo secuestrados a través del Poder Judicial.

S. L. presentó la denuncia en septiembre del 2004, cuando su hija tenía tres años y medio. En ese momento estaba conviviendo con el padre de su hija y tenían planes de agrandar la casa y la familia. Hasta que descubrió signos de abuso sexual en su niña. Ella tiene miedo, un miedo que denuncia: “Mi temor es que pueda pasar lo mismo que en otros casos. Yo no quiero ir a pedir por mi hija que ha sido secuestrada de mi casa, del club o de la escuela por la propia Justicia para que vaya a revincularse con su padre o con su abuela con los cuales ella no quiere revincularse. Yo me imagino las personas cuando estaban en la dictadura esperando que les vengan a derribar la puerta de sus casas. Ya no son grupos de tarea sino la Justicia junto con el brazo ejecutor, que es la policía”.



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sábado, 26 de enero de 2013

CABEZAS: LA REVELACIÓN DEL PODER







Revelar la identidad, la privacidad, la intimidad del poder es una cuestión que los "grandes señores" no perdonan. José luis Cabezas Tomó una imagensimbolo que desentrañó la identidad personal de la impunidad que hasta ese flash, permanecía encriptada bajo todos los códices posibles. Ese fue el disparador exponencial que determinó semejante decisión homicida. No fue más que la necesidad de dejar en claro quien ejercía el mando, quien era el amo y quienes los siervos. Aunque simulen otra cuestiones, en lo intrínseco del acto criminal de Cabezas, lo que está es la sacralización del jefe que no puede adquirir entidad alguna públicamente hablando, porque su naturaleza como tal es lo oculto. Develarlo, es en su lógica, un ataque sistemático a su existencia como un ser común, y no lo contrario, el magnate capitalista sempiterno, que ama ser así, que vive donde está su tesoro, que cela con su vida su señorío...

Esa, la de Yabrán, fue y es muchísimo más que una fotografía, todos lo sabemos, aquella estampa de la verdad se transformó inmediatamente en el icono de la lucha por Justicia. No era compatible, ni lo sigue siendo, que en democracia se ejecute a un periodista por transparentar aquello que los demonios del modelo neoliberal no quieren que se sepa. Su conocimiento, su estilo de vida aquel que amasan cotidianamente con la inescrupulosa dialéctica del “buen burgués”, es un peligro que se comunique socialmente. Porque en definitiva, esto es lo que hizo José Luis cabezas, comunicar a través de su cámara, socializar el enigma. Un peligro, un absoluto riesgo y una amenaza vital. Para ellos...

Rodolfo Walsh escribía que es inconcebible para el pueblo el modo en que vive, piensa y actúa la burguesía. No se tiene una idea cabal , por la articulación cultural-ideológica del sistema, de ese carácter típico de clase, de sus vericuetos, sus peculiaridades... Se tiene una idea general difusa, prefabricada por los motores educacionales del capitalismo de ese mismo carácter, de su expresión, pero jamás una representación consciente de su poder. Ese camino es el que empezó a transmitirse con Cabezas, un acercamiento a lo constitutivo y esencial de una arquitectura clandestina del imperio.


Raúl Olivares.
Todos los derechos reservados.-



CABEZAS: UN ÁRBOL EN LA CAVA...







Al cumplirse el 16° aniversario del asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas, la Asociación de Reporteros Gráficos (ARGRA) junto a la familia de José Luis lo recordaron en la cava donde fue encontrado muerto (donde plantaron un árbol) y en Mar de Ajó, donde se realizó un festival en su memoria. En los actos también estuvieron presentes la hermana del reportero gráfico, Gladys Cabezas, y la hija, Agustina Cabezas; el vicegobernador de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, y el periodista Gabriel Michi, compañero de trabajo del fotógrafo. Nuna quedó esclarecido al 100% este asesinato pese al unánime grito del pueblo argentino: ¡No se olviden de Cabezas!.


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viernes, 25 de enero de 2013

¡¡NO SE OLVIDEN DE CABEZAS!! A 16 AÑOS




En memoria: José Luis Cabezas

Asesinado el 25 /1/1997 


"Cabezas, presente. Ahora y siempre"

Justicia!!



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José Luis Cabezas




Durante un acto en la cava de General Madariaga donde apareció el cuerpo del fotógrafo asesinado en 1997, familiares, compañeros de trabajo y la Asociación de Reporteros Gráficos (Argra) volvieron a exigir "justicia" y la prisión efectiva de los condenados como autores materiales del crimen, algunos de los cuales goza de un régimen de libertad.

"Cabezas, presente. Ahora y siempre", gritaron los reporteros gráficos, junto con la hermana de José Luis Cabezas, Gladys, y el vicegobernador Gabriel Mariotto.
Cabezas fue hallado asesinado adentro de un auto con las manos esposadas en la espalda y dos tiros en la cabeza, y su crimen se produjo poco después de que tomara las primeras fotos públicas del empresario Alfredo Yabrán. Los expolicías Aníbal Luna y Sergio Cammaratta fueron condenados a reclusión perpetua en febrero de 2000 junto al expolicía Gustavo Prellezo, los "Horneros" Horacio Braga, Gustavo González, Héctor Retana y José Luis Auge, y Gregorio Ríos, jefe de la custodia de Yabrán, este último por ordenar el crimen.
En diciembre de 2002 fue condenado a perpetua el excomisario de Pinamar Alberto "Liebre" Gómez, acusado de "liberar la zona" donde se cometieron el secuestro y el crimen del reportero gráfico. Tras las condenas, una apelación ante Casación bonaerense derivó en reducción de las sentencias y permitió a los acusados ir obteniendo la libertad gracias al beneficio del "dos por uno" o volver a sus casas para cumplir la pena bajo arresto domiciliario.
Como los acusados habían sido detenidos entre abril y mayo de 1997, a partir de 2004 los involucrados comenzaron a ser excarcelados bajo fianza por esa ley. Luna y Cammaratta quedaron libres en 2006 pero volvieron a prisión a fines de noviembre pasado cuando se determinó que debían completar la pena en prisión.

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TRAGEDIA DE ONCE:CONVOCATORIA A 1 AÑO (22/2/13)




Familiares y Amigos de Victimas y 


Heridos de la Tragedia de Once 22/2





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jueves, 24 de enero de 2013

"CUIDA DE TI MISMO" / ENTREVISTA A M. FOUCAULT (1984)


  
















"–Sí, porque en realidad ¿qué es la ética sino la práctica de la libertad, la práctica reflexiva de la libertad? La libertad es la condición ontológica de la ética; pero la ética es la forma reflexiva que adopta la libertad".


Michel Foucault, de la entrevista de Pagina/12


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PSICOLOGIA › RESCATE DE LA PALABRA DE MICHEL FOUCAULT


“Cuida de ti mismo”

Pocos meses antes de la muerte de Michel Foucault, en 1984, se publicó por primera vez esta entrevista donde –en diálogo con el filósofo cubano Raúl Fornet-Betancourt– explicó y aclaró errores sobre conceptos centrales de su investigación: la noción de “cuidado de sí mismo”, los “juegos de verdad”, las “prácticas de libertad”, la diferencia entre poder y dominación, y más.

 Por Raúl Fornet-Betancourt, Helmut Becker y Alfredo Gómez-Muller *
–¿Se ha producido un salto entre su problematización anterior y la actual, a partir del concepto de “cuidado de uno mismo”?
–El problema de las relaciones existentes entre el sujeto y los juegos de verdad yo lo había enfocado, o bien a partir de prácticas coercitivas, tales como la psiquiatría y el sistema penitenciario, o bien bajo la forma de juegos teóricos o científicos, tales como el análisis de las riquezas, del lenguaje o del ser viviente. En mis cursos en el Colegio de Francia he intentado captar este problema a través de lo que podría denominarse una práctica de sí mismo que a mi juicio es un fenómeno importante en nuestras sociedades desde la época greco-romana, pese a que no haya sido estudiado. Estas prácticas de sí mismo tuvieron en la civilización griega y romana una importancia, y sobre todo una autonomía, mucho mayores de lo que tuvieron posteriormente, cuando se vieron asumidas en parte por instituciones religiosas, pedagógicas, de tipo médico y psiquiátrico –contestó Michel Foucault.

–Se trata de un trabajo de uno sobre sí mismo que puede ser comprendido como una determinada liberación, como un proceso de liberación.
–Tendríamos que ser en lo que se refiere a esto un poco más prudentes. Siempre he desconfiado un tanto del tema general de la liberación, en la medida en que, si no lo tratamos con algunas precauciones y en el interior de determinados límites, se corre el riesgo de recurrir a la idea de que existe una naturaleza o un fondo humano que se ha visto enmascarado, alienado o aprisionado en y por mecanismos de represión como consecuencia de un determinado número de procesos históricos, económicos y sociales. Si se acepta esta hipótesis, bastaría con hacer saltar estos cerrojos represivos para que el hombre se reconcilie consigo mismo, para que se reencuentre con su naturaleza o retome el contacto con su origen y restaure una relación plena y positiva consigo mismo. Me parece que este planteamiento no puede ser admitido así sin más, sin ser previamente sometido a examen. Con esto no quiero decir que la liberación, o mejor, determinadas formas de liberación, no existan: cuando un pueblo colonizado intenta liberarse de su colonizador, estamos ante una práctica de liberación en sentido estricto. Pero sabemos muy bien que, también en este caso concreto, esta práctica de liberación no basta para definir las prácticas de libertad que serán a continuación necesarias para que este pueblo, esta sociedad y estos individuos puedan definir formas válidas y aceptables de existencia o formas mas válidas y aceptables en lo que se refiere a la sociedad política. Por esto insisto más en las prácticas de libertad que en los procesos de liberación que, hay que decirlo una vez más, tienen su espacio, pero que no pueden por sí solos, a mi juicio, definir todas las formas prácticas de libertad. Nos encontramos ante un problema que me he planteado precisamente en relación con la sexualidad: ¿tiene sentido decir “liberemos nuestra sexualidad”? ¿El problema no consiste más bien en intentar definir las prácticas de libertad a través de las cuales se podría definir lo que es el placer sexual, las relaciones eróticas, amorosas y pasionales con los otros? Este problema ético de la definición de las prácticas de libertad me parece mucho más importante que la afirmación, un tanto manida, de que es necesario liberar la sexualidad o el deseo.

–¿El ejercicio de las prácticas de libertad no exige un cierto grado de liberación?
–Sí, por supuesto. Por eso hay que introducir la noción de dominación. Los análisis que intento hacer se centran fundamentalmente en las relaciones de poder. Y entiendo por relaciones de poder algo distinto a los estados de dominación. Las relaciones de poder tienen una extensión extraordinariamente grande en las relaciones humanas. Ahora bien, esto no quiere decir que el poder político esté en todas partes, sino que en las relaciones humanas se imbrica todo un haz de relaciones de poder que pueden ejercerse entre individuos, en el interior de una familia, en una relación pedagógica, en el cuerpo político, etcétera. El análisis de las relaciones de poder constituye un campo extraordinariamente complejo. Y este análisis se encuentra a veces con lo que podemos denominar hechos o estado de dominación, en los que las relaciones de poder, en lugar de ser inestables y permitir a los diferentes participantes una estrategia que las modifique, se encuentran bloqueadas y fijadas. Cuando un individuo o un grupo social consigue bloquear un campo de relaciones de poder haciendo de estas relaciones algo inmóvil y fijo e impidiendo la mínima reversibilidad de movimientos –mediante instrumentos que pueden ser tanto económicos como políticos o militares–, nos encontramos ante lo que podemos denominar un estado de dominación. Es cierto que en una situación de este tipo las prácticas de libertad no existen o existen sólo unilateralmente, o se ven recortadas y limitadas extraordinariamente. Estoy de acuerdo con usted en que la liberación es en ocasiones la condición política o histórica para que puedan existir prácticas de libertad. Si consideramos, por ejemplo, la sexualidad, es cierto que han sido necesarias una serie de liberaciones en relación con el poder del macho, que ha sido preciso liberarse de una moral opresiva que concierne tanto a la heterosexualidad como a la homosexualidad: pero esta liberación no permite que surja una sexualidad plena y feliz en la que el sujeto habría alcanzado al fin una relación completa y satisfactoria. La liberación abre un campo a nuevas relaciones de poder que hay que controlar mediante prácticas de libertad.

–¿No podría la liberación en sí misma ser un modo o una forma de práctica de la libertad?
–Sí, así es en un determinado número de casos. Existen casos en los que la liberación y la lucha de liberación son indispensables para la práctica de la libertad. En lo que se refiere a la sexualidad, por ejemplo –y lo digo sin ánimo de polemizar, ya que no me gustan las polémicas–, creo que en la mayor parte de los casos son infecundas. Existe un esquema reichiano, derivado de una cierta forma de leer a Freud, que supone que el problema es sólo de liberación. Para decirlo un tanto esquemáticamente, existiría el deseo, la pulsión, la prohibición, la represión, la interiorización, y el problema se resolvería haciendo saltar todas estas prohibiciones, es decir, liberándose. En este planteamiento –y soy consciente de que caricaturizo posiciones más interesantes y matizadas de numerosos autores– está totalmente ausente el problema ético de la práctica de la libertad: ¿Cómo se puede practicar la libertad? En lo que se refiere a la sexualidad, es evidente que es sólo a partir de la liberación del propio deseo como uno sabrá conducirse éticamente en las relaciones de placer con los otros.

–Usted dice que es necesario practicar la libertad éticamente.
–Sí, porque en realidad ¿qué es la ética sino la práctica de la libertad, la práctica reflexiva de la libertad? La libertad es la condición ontológica de la ética; pero la ética es la forma reflexiva que adopta la libertad.

–¿Es la ética aquello que se lleva a cabo en el cuidado de uno mismo?
–El cuidado de uno mismo ha sido, en el mundo greco-romano, el modo mediante el cual la libertad individual, o hasta cierto punto la libertad cívica, ha sido pensada como ética. Si usted consulta toda una serie de textos que van desde los primeros diálogos platónicos hasta los grandes textos del estoicismo tardío –Epicteto, Marco Aurelio, etcétera– podrá comprobar que este tema del cuidado de uno mismo ha atravesado realmente toda la reflexión moral. Es interesante ver cómo en nuestras sociedades, por el contrario, el cuidado de uno mismo se ha convertido, y es muy difícil saber exactamente desde cuándo, en algo un tanto sospechoso. Ocuparse de uno mismo ha sido, a partir de un determinado momento, casi espontáneamente denunciado como una forma de egoísmo o de interés individual en contradicción con el interés que es necesario prestar a los otros o con el necesario sacrificio de uno mismo. Esto ha tenido lugar durante el cristianismo, pero no me atrevería a afirmar que se deba pura y simplemente al cristianismo. La cuestión es mucho más compleja porque en el cristianismo procurar la salvación es también una manera de cuidar de uno mismo. Pero la salvación se efectúa en el cristianismo a través de la renuncia a uno mismo. Se produce así una paradoja del cuidado de sí en el cristianismo, pero éste es otro problema. Para volver a la cuestión que usted planteaba, creo que entre los griegos y los romanos, sobre todo entre los griegos, para conducirse bien, para practicar la libertad como era debido, era necesario ocuparse de sí, cuidar de sí, a la vez para conocerse y para formarse, para superarse a sí mismo, para controlar los apetitos que podrían dominarnos. La libertad individual era para los griegos algo muy importante: no ser esclavo (de otra ciudad, de los que os rodean, de los que os gobiernan, de vuestras propias pasiones) era un tema fundamental. La preocupación por la libertad ha sido un problema esencial, permanente, durante los ocho magnos siglos de la cultura clásica. Existió entonces toda una ética que ha girado en torno del cuidado de sí, lo cual proporciona a la ética clásica su forma tan particular. No pretendo afirmar con esto que la ética sea el cuidado de sí, sino que, en la Antigüedad, la ética, en tanto que práctica reflexiva de la libertad, ha girado en torno de este imperativo fundamental: “cuida de ti mismo”.

–Imperativo que implica la asimilación de los logoi, de las verdades.
–Sin duda, uno no puede cuidar de sí sin conocer. El cuidado de sí es el conocimiento de sí –en un sentido socrático-platónico–, pero es también el conocimiento de un cierto número de reglas de conducta o de principios que son a la vez verdades y prescripciones. Se trata de operar de tal modo que estos principios os digan en cada situación y en cierto modo espontáneamente, cómo tenéis que comportaros. Encontramos aquí una metáfora que no proviene de los estoicos sino de Plutarco, que dice: “Es necesario que hayáis aprendido los principios de una forma tan constante que, cuando vuestros deseos, vuestros apetitos, vuestros miedos se despierten como perros que ladran, el Logos hable en vosotros como la voz del amo que con un solo grito sabe acallar a los perros. Es ésta la idea de un Logos que en cierto modo podrá funcionar sin que vosotros tengáis que hacer nada: vosotros os habréis convertido en el Logos o el Logos se habrá convertido en vosotros mismos”.

–Podríamos volver a la cuestión de las relaciones entre la libertad y la ética. Cuando usted afirma que la ética es la parte reflexiva de la libertad ¿quiere decir que la libertad puede cobrar conciencia de sí misma como práctica ética? ¿Es en su conjunto y siempre una libertad por decirlo así moralizada, o es necesario un trabajo sobre sí mismo para descubrir esta dimensión ética de la libertad?
–Los griegos, en efecto, problematizaban su libertad, la libertad del individuo, para convertirla en un problema ético. Pero la ética en el sentido en que podían entenderla los griegos, el ethos, era la manera de ser y de conducirse. Era un cierto modo de ser del sujeto y una determinada manera de comportarse que resultaba perceptible a los demás. El ethos de alguien se expresaba a través de su forma de vestir, de su aspecto, de su forma de andar, a través de la calma con la que se enfrentaba a cualquier suceso, etc. En esto consistía para ellos la forma concreta de la libertad: es así cómo problematizaban su libertad. El que tiene un ethos noble, un ethos que puede ser admirado y citado como ejemplo, es alguien que practica la libertad de una cierta manera. No creo que sea necesaria una conversión para que la libertad sea pensada como ethos, sino que la libertad es directamente problematizada como ethos. Pero para que esta práctica de la libertad adopte la forma de un ethos que sea bueno, bello, honorable, estimable, memorable, y que pueda servir de ejemplo, es necesario todo un trabajo sobre sí mismo.
* Fragmentos de una entrevista con Michel Foucault realizada el 20 de enero de 1984. Publicada en la revista Concordia 6 (1984) 96-116. La versión completa puede consultarse enhttp://www.topologik.net/Michel_Foucault.htm, bajo el título “La ética del cuidado de uno mismo como práctica de la libertad”.


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