lunes, 7 de mayo de 2012

MEXICO IMPUNE: NARCOTRAFICO Y PODER

NI UNA MAS!!



“Verdad  y  justicia para Regina Martínez”





“No se mata la verdad matando periodistas”



http://zapateando.wordpress.com/

Si existe un país donde el periodismo y la libertad de prensa se hallan limitados y conculcados y en donde aquellos que se atreven a ejercerlo en forma seria e independiente están en constante peligro de muerte, ese es México. Los carteles mafiosos, narcotraficantes, asociados con el poder político en el Estado (que no solo es el de México en América Latina), nuevamente han procedido en cuestión, asesinando a una periodista. Esta vez ha sido Regina Martínez, corresponsal de la revista "Proceso" en la asediada Veracruz, donde solo este año han ejecutado a más de 250 personas!! Periodista especializada en el tema, Regina había desarrollado sus postreros artículos, en la revista citada, enfatizando los íntimos  vínculos entre los principales carteles de la droga y el Estado a través de sus estructuras políticas, el de sus fuerzas de seguridad y las policiales. No es un hecho novedoso, desgraciadamente se trata de un fenómeno que habla con certeza de la profunda connivencia del narcotráfico con el modelo neoliberal latinoamericano en crisis, su partidocracia y en algunos países concretos (como México), el enquistamiento de estas organizaciones delictivas en el plano de la legitimidad, las que asumen para su funcionamiento pleno, la característica de conventículo oficializado en los denominados Narco-Estados. El crimen de Regina Martínez expresa la realidad de una sociedad en descomposición progresiva que es impotente frente al avance del delito institucionalizado y socializado. Se trata de una guerra abierta, clara y decisiva entre las fuerzas vivas y democráticas de un país y el Narco-modelo que ya ha llegado al poder y necesita silenciar, aniquilando todo aquello que se cruce en su paso y  le impida establecerse  definitivamente en el mismo. 
Allí en nuestro querido México, ese curso que corroe y desintegra todo tejido social, convirtiéndolo en un infierno, no está tan lejos de nuestra cercana realidad. La expansión del mercado de las drogas en Argentina, especialmente en las zonas urbanizadas, más excluidas y con un alto grado de hacinamiento habitacional, ya se manifiesta y se "distingue" por las gravísimas consecuencias inherentes a este flagelo. A propósito del papel del Estado en el contexto del neoliberalismo en nuestros países, en ocasión de un crimen en la Pcia. de Bs As., en su ciudad capital, La  Plata, el fiscal de turno Álvaro Garganta, en un reportaje por radio* comentaba los enormes esfuerzos que realizaron los investigadores de su fiscalía en el esclarecimiento del mismo. En sus palabras: (...las indagaciones) "tuvimos que realizarlas vestidos de botelleros en esas zonas donde la jurisdicción del Estado no llega". Y es en este dato, en esta cita, donde me detengo. No es que no sepamos lo que el funcionario dice, sino que sus dichos, denotan una clara  conceptualización de lo que este Estado puede en función de sus nuevos objetivos. Y ello es un signo irrefutable de sus propias e innatas limitaciones proyectadas de esa manera, no constitutivas del mismo, sino buscadas, moldeadas para un fin determinado. Se delimita su rol, planificando hasta dónde llegará su fuerza legal, consecuente con los intereses de la clase o corporaciones que lo detenten. Ahora bien, que un fiscal hable ya en estos términos, explica temerariamente que se asume la derrota del Estado de derecho en ese sentido como un hecho consumado, y que el mismo ha sido en esas zonas amplísimas del Gran Bs As.-donde la miseria no se pasea, habita- ha sido decía, concretamente hasta ahora,  superado por las mafias, sus cómplices en el mismo Estado (ya otro) y por proyección ideológica, en sus instituciones más importantes.


Así como la civilización Azteca y otras contemporáneas a la suya, fueron exterminadas íntegramente por el invasor español, así como desintegraron su contextura colectiva y comunitaria, triturando su identidad; del mismo modo los nuevos invasores, ahora mayoritariamente internos, son el factor cancerígeno que desde los intestinos del poder se expande a fuerza de sangre y fuego, sometiendo en el miedo y el espanto a todo un pueblo. Y cuando el demiurgo de la Dignidad, el valor como Bien Supremo y Común, le hace frente con entereza, la lucha se transforma en un ejercicio ciudadano, de todos. Los primeros que se atreven, que están dispuestos a entregar sus vidas, por la virulencia y salvajismo del enemigo, son los que no tienen miedo o los que lo tienen y con él van adelante de todos, portando un mensaje luminoso y categórico, más grande y potente que el de la misma muerte: Podemos!! No son inmortales!!
















Regina Martínez, mártir de la libertad de prensa, la verdad y la democracia, era la amenaza reveladora de las promiscuas relaciones carnales entre el narcotráfico y el poder oficial,  que "debía" ser crucificada. La ética y el valor no pueden de ninguna manera convivir en una sociedad narcotizada como pretenden implantar los poderosos señores que se apropian de las personas, sicariato mediante, porque una es sustancialmente la vida y la otra, no solo es la muerte, sino la muerte en vida que es muy distinto, su antagónica irremediablemente. 
Destruir y desmantelar a estos demonios articulados entre sí, con su enorme poder sistémico, que se amparan y crecen en la obscuridad de la existencia, que instauran el terrorismo de Estado, es una tarea épica y urgente. Transformar desde ya  la desmembrada urdimbre social y construir desde allí espacios de conciencia y militancia, es una necesidad imperiosa de toda democracia,  que a su vez se debe replantear en qué tipo de sociedad quiere vivir y con qué modos de poder aspira edificar una Nación más justa. Nada es imposible, aunque la muerte parezca más fuerte, lo que Regina ofreció es insuperable y sublime, tanto es así como para que no podamos decirle que ella y los que ofrendaron sus vidas por la Libertad y la Verdad, nos duelen tanto, pero tanto, que no habrá consuelo que lo aplaque, más que la Justicia que podamos conquistar para nosotros mismos y para quién más que para nuestros propios hijos, quienes algún día, cuestionarán ese compromiso, siendo habitantes de un mundo más equitativo o no, que el que hoy por hoy nos toca padecer.



Raúl Olivares.-
Todos los derechos reservados.-


SANCIÓN Y APLICACIÓN DE  LA "LEY DE VICTIMAS" 

Y LA "LEY DE DEFENSORES" *

REGINA MARTÍNEZ MÁRTIR DEL PERIODISMO LIBRE 

Y DEL PUEBLO MEXICANO!! 







* “Ley de víctimas” Una norma que obliga al Estado a garantizar asistencia y protección a las víctimas de la violencia, así como la reparación del daño tanto material como moral. Amnistía Internacional ha pedido la aprobación de una “ley de defensores” que incluya a periodistas y activistas por los derechos humanos que complemente a la “Ley de víctimas”.


*Reportaje de Radio Mitre, "Primera Mañana", Nelsón Castro.

No hay comentarios: