NOSOTROS, LOS HIJOS DEL CORDOBAZO

1969 - 29 de Mayo - 2012

El circulo se quebró, la experiencia popular vive!!

http://comunicacionfolk.blogspot.com.ar/2010/03/las-imagenes-de-la-marcha-por-la.html

"Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.

La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo..." 

Rodolfo Walsh.

Fue en mayo de 1969, hace ya 43 años, Ongania había gestado su golpe de Estado derrocando a Arturo Illia, presidente constitucional, con el aval de los burócratas sindicales como Augusto Timoteo Vandor y Jose Alonso. Desde la represión, el autoritarismo y el terror anunciaban una larga noche de dictadura y sometimiento. La crisis se hizo presente en todos los ámbitos de la vida económica-social y política del país, especialmente en la clase trabajadora y en todos los niveles educacionales. Explotó la rebelión popular en provincias como Corrientes y Santa Fe, particularmente Rosario. En Córdoba, la situación de las condiciones objetivas de la lucha, eran distintas, en tanto y en cuanto los trabajadores, estructurados férreamente en cada uno de los distintos sindicatos, especialmente SMATA (Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor) y Luz y Fuerza, sostenían una resistencia continua, revolucionaria y decidida, que había permitido una conciencia de clase que pocas veces se había alcanzado en la lucha del movimiento obrero organizado. A ello se le debe sumar las corrientes estudiantiles, quienes desde sus procesos históricos de lucha, en forma esencial la que provenía ya de la Reforma del '18, lograron un carácter de vinculación y unidad con los trabajadores, que representaron la masa crítica de la protesta social y su posterior estallido.

Esa semana, en Córdoba, el gobierno provincial había dictaminado la abolición del llamado "sábado ingles", pretendiendo  avasallar una conquista proletaria de nivel internacional. Inmediatamente el SMATA  y Luz y Fuerza declaran el paro activo y movilización en contra de la medida para el 29 de mayo. Ese día, esa jornada especial y única en las luchas obreras y estudiantiles, Córdoba fue literalmente tomada y controlada por los manifestantes. 

Hay que observar las filmaciones de la epoca, del 29 glorioso, para caer en la cuenta de la crudeza de la ocupación urbana, de la unidad y valor de los protagonistas en insurrección. Muy pocas veces se estuvo tan cerca de tomar el poder en condiciones organizativas de liderazgo y de fuerza como lo fue aquella vez. La ciudad estuvo en manos de los heroicos hombres y mujeres, vecinos, obreros y estudiantes, todos unidos como nunca en una gesta que abarcó prácticamente 24 hs. de posesión y ataque a la presencia de las grandes multinacionales   de la industria automotriz en Córdoba. 

Los grandes y  extraordinarios sindicalistas de ese tiempo, combativos y leales dirigentes, con un trascendente programa transformador, entre los cuales se destacaban Agustín Tosco, Atilio López, René Salamanca, Elpidio González, llevaron adelante este levantamiento emblemático que precisamente repercutiría en todos los movimientos sociales de Latinoamérica, como lo prueban los distintos sublevamientos que le siguieron después.  

La exigencia era clara: 

• Normalización Institucional del País con llamado a elecciones libres y democráticas.
• Aumentos salariales de un 40% acorde con el costo de vida de aquellos  tiempos.
• Protección y desarrollo de la Industria Nacional, que se hallaba mayormente en manos de los grandes monopolios foráneos. 
• Fuentes de trabajo que dieran plena ocupación sustentable a la gran cantidad de  desocupados que vivían en la pobreza y la miseria.
• Reincorporación de los trabajadores cesanteados y anulación de las sanciones y condenas en ejercicio del legitimo derecho de huelga.
• En concordancia con las corrientes estudiantiles, demandaba una Educación al alcance de todos, especialmente de los obreros, con una Universidad Nacional de apertura a las necesidades de los hijos de trabajadores.

Indudablemente la represión fue brutal y la dictadura se llevó a varios compañeros que ese día cayeron. Y otros cientos terminaron en las cárceles "con los dirigentes a la cabeza"...

La autodenominada "revolución argentina" de Ongania se desplomó producto directo de la fenomenal crisis que alcanzó el Cordobazo. Este levantamiento se transformó en una instancia de cambio, un modelo que mostró de lo que es capaz el poder popular organizado y al mismo tiempo produjo un punto de inflexión, verdadera bisagra de la historia del país y de los movimientos políticos que le sucederían.

No fue una leyenda, no es una epopeya inalcanzable, eso nos quieren inculcar, como que el Cordobazo solo se produjo una vez  y  allá lejos,  hace 43 infinitos e insondables años. Esa es la tarea de los ideólogos del sistema, la nuestra es plantear su memoria como efecto multiplicador en el presente y el futuro. Allí donde la desesperanza, el pesimismo o el escepticismo sientan cabeza, allí el Cordobazo mueve las estanterías de la conciencia adormecida, despertándola para que de esa manera, piense, actué, se mueva y genere siempre, nuevas Utopías revolucionarias en los tiempos en que nosotros, los hijos del Cordobazo, "todavía cantamos..."

Raúl Olivares.

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