"la Argentina tiene un transporte de pasajeros que es el mejor de Latinoamérica".
Senador Miguel Pichetto, titular del bloque de senadores del Frente para la Victoria (FpV)
21 de Marzo de 2012 / Sesiones del Congreso de La Nación.-
http://www.elcomercial.com.ar/index.php?option=com_telam&view=deauno&idnota=168680&Itemid
Han visto las caras de las victimas de la tragedia de once? Han oído sus gritos en mitad de la desgracia, sin saber qué les estaba pasando? Todos hechos una "masa" indescriptible de dolor?
El que iba a trabajar a la panadería, el que iba a la oficina, la que viajaba para buscar trabajo, la que iba a visitar un enfermo... Todos ellos, los 51 que ese día tomaron ese tren, de esa formación, de esa maldita y criminal empresa. Todos ellos, ahora nos miran, nos observan, esperan de nosotros que hagamos lo que debemos. ¿Qué más hace falta para que nos movilicemos, para que nos demos cuenta que así no se puede seguir, que si no lo hacemos nosotros por nosotros mismos, nadie lo hará; que el enemigo es el mismo de siempre: la indiferencia, el acostumbramiento, la abulia, el miedo... Qué más hace falta?
Nos tocaron la vida, la integridad, la dignidad, nos tocaron el presente y el futuro... ¿Creemos que estamos en una jugada insolente y macabra del destino? El destino se hace hoy. No "juguemos" nosotros con el. El tren es de una empresa, la empresa tiene un dueño, la empresa tiene una concesión, la concesión la dio un gobierno, el gobierno es este, del presente, no otro, el gobierno tuvo y tiene "vínculos" (negociados) con esa empresa y esos "vínculos" determinaron lo que definitivamente no fue un accidente. El gobierno, la empresa y "los vínculos" continúan... No solo no cambió algo, sino que se profundizó el autoritarismo, la arbitrariedad, la sorna de los funcionarios jactándose de su impunidad, alabando las políticas públicas de transporte encima de la devastación. Es decir, se agrava la presencia perversa del Estado y de aquello que denominan "modelo" en todos los niveles sociales, especialmente en los estratos más empobrecidos.
Hay alguien que me dijo que "los matan como si fueran pajaritos...", sin valor, como si fuesen cosas, como nada...Me impresiona reconocer que esa frase, tan asoladora, sea verdad.
Raúl Olivares.-
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