1928 - 14 de Mayo -2012
Su mejor regalo?
"...Creo que el mejor regalo sería ver a las nuevas generaciones creyendo y luchando por otro mundo posible, donde la solidaridad sea hábito, no virtud; la práctica de la justicia una exigencia ética; el socialismo el nombre político del amor.
Frei Betto / Granma – Desde Abajo (2008)
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/las12/13-1788-2005-03-03.html
Ernesto Guevara nació un 14 de mayo de
1928, en la ciudad de Rosario, Argentina, a orillas del río Paraná. De ahí en
más su vida, su amor y su entrega no descansaron un solo instante, sino y
solo sino, hasta la heroica y gloriosa hora de
la Higuera, allí en Bolivia,
donde la metralla enemiga lo alcanzó, como antes también lo
hicieron la soledad y "el olvido" de
algunos... Sin embargo el Che, decididamente hizo lo
suyo, atravesando los caminos de los pueblos con su sangre, su mirada,
su alegría, su carisma. Como hechizando los sueños oprimidos que el
sistema ya daba por sentado, no volverían. Pero muchos de aquellos
se atrevieron y saltando la frontera del inconsciente a la realidad, se
transformaron en barricadas, en movimientos sociales, en pequeñas pero
trascendentes revoluciones. Entonces ahí, el Che fue más que el
guerrillero de Sierra Maestra, que el Comandante de Santa Clara; fue en la
mente de los trabajadores, de los jóvenes, de los estudiantes, el Mito.
Y eso, eso sí que es un enorme problema para los poderosos, porque indefectiblemente, ésta clase de Mitos, más humanos y asequibles que sus imperiales ídolos, no los deja descansar ni dormir
nunca...
Y a pesar de sus enemigos, del marketing que no cesa
en el intento de hacerlo mercancía, de los estúpidos que siguen ese vano y siniestro intento, del imperialismo que de esa y todas las formas lo sigue acechando y
dispara interminablemente hasta su sombra, el mismo que continuamente apunta a su inconmensurable presencia, la más peligrosa: su ejemplo emulado que esperanza a millones; a pesar del miedo, del hoy y del mañana, la Utopía revolucionaria que él
mismo significa, sigue en
pie, está viva por las calles, por las avenidas, por todo lugar donde la Justicia
como en celo lo reclame.
Y es tal su fuerza inclaudicable, que la enseñanza de su vida, de su
compromiso insurgente, se "esparce y contagia", como
un mensajero histórico que transmite incansablemente que
la revolución es impostergable, sin más expresiones, en quienes lo reciben, que las de
la admiración o a veces la del silencio innegable que produce la
verdad de aquel anuncio. Es que con tanto amor no se puede pelear por mucho
tiempo, sino hasta ser vencido por su entrañable y permanente caricia,
imposible de no sentir...
Raúl Olivares.-
Todos los derechos reservados.-
Raúl Olivares.-
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